Alrededor suyo, como envolviéndolo, hay tres -sí, tres- computadoras. Y sobre la mesa, todavía un celular BlackBerry (casi un ordenador de bolsillo). Dante Loza, director del Registro Civil de Tucumán desde octubre de 2003, sonríe y confirma: "me gusta mucho la tecnología". La imagen distorsiona cualquier tipo de asociación del funcionario con la institución que dirige, donde aún predominan el papel -bueno, Loza se define a sí mismo como "empresario gráfico desde la cuna"- y los sellos, y escasean las herramientas de gestión electrónica.
Convencido de que esa imagen burocrática del Registro Civil cambiará por completo en mayo, cuando comience a funcionar el Centro de Documentación Rápida (CDR), Loza contesta los reclamos de los ciudadanos con estupefacción: "no entiendo a la gente que se queja".
-Colas interminables, mala atención, demora... ¿Qué opina de la insatisfacción del ciudadano respecto del Registro Civil?
-¿Qué opino? ¿A usted le parece que haya 2.000 documentos devueltos porque el correo no encuentra a quién entregárselos? ¿De qué burocracia me habla si ya no hay ni que ir a buscar el DNI? No entiendo a la gente que se queja. ¿Por qué no busca las 20.000 libretas del viejo sistema que ya están listas? Al ciudadano no le interesa. No colabora para nada: paga por afuera de la caja para ahorrarse el trámite y después quiere reclamar sin comprobante. Antes había una demora, ya no.
-¿Cuánto tarda en llegar el nuevo DNI?
-Entre 30 y 45 días como máximo. El documento viejo tenía un proceso más largo e incierto. Además, nunca nos enterábamos si había alguna observación. Ahora sí. Antes existía un espacio vacío, un compartimento estanco: pasados los ocho meses de espera, directamente hacíamos de nuevo el trámite.
-¿Tiene previsto arreglar el edificio de Villa Luján? Está en pésimas condiciones.
-Vamos a reparar el techo colapsado de la nave de la casa central y a remodelar la sede de Villa Luján cuando terminemos el CDR. También queremos interconectar los registros y juzgados de Paz del gran San Miguel de Tucumán. La información estará disponible en línea. Además, hemos avanzando con la digitalización de dos millones de actas y vinculaciones desde 1968. Por fin estamos preparados para un siniestro.
-¿Es verdad que hace tres años que usted no va al Registro de Villa Luján?
-No voy a entrar en eso, no me compete. Es un comentario sin relevancia y tendencioso.
-¿Por qué hay un cupo diario de entrega de números para tramitar el DNI?
-Lamentablemente existe un tiempo físico para atender a la gente. En la casa central estamos entre las 8 y las 17, y no podemos hacer más. En el caso de la inscripción del recién nacido, el empleado debe llenar a mano dos libros. Queremos mitigar la espera. LA GACETA sacó hace poco un informe que dice que el ciudadano se pudre después de 8 minutos en la fila. Es lógico. Con el CDR tendremos una capacidad de entre 300 y 350 trámites por jornada, que cuadruplicará los 80 números actuales. Y ya no habrá papel, todo será electrónico. Con un "enter", el formulario estará en Buenos Aires. El salto de calidad es abismal.
-¿El Estado ha trabajado para registrar a los indocumentados?
-Se está haciendo un operativo impresionante. El Gobierno se ha preocupado por ir a buscar a los indocumentados porque no tenemos datos. Pero, más allá de eso, entre 2005 y el presente, hicimos 250.000 trámites gratuitos para beneficiar a los tucumanos de escasos recursos. Los planes sociales han generado una ebullición en el Registro Civil. Si usted tiene un DNI, gana plata.
-¿Cuál es el presupuesto del Registro Civil?
-Desconozco, no lo tengo en la cabeza. Hay que preguntar en el Ministerio de Gobierno.
-Tanto en Villa Luján como en la calle 24 de Septiembre no hay guardia policial...
-Es un temita (sic) que estoy analizando con el área de Seguridad. Sí es importante, porque la concentración de gente se presta para el arrebato y atrae a los pungas (sic).